9 dic 2010

The Green side of the Moon...

Hace demasiado que no escribo y puede que mis dedos esten algo oxidados, asi que pido perdon de antemano si escribo cosas toscas y con un toque inapropiado de inmadurez para lo que estoy acostumbrado a crear.

Sin embargo, no es que no hayan pasado cosas en mi vida, la vida es sinonimo de cambio. Mueren las hojas del calendario, la arena del tiempo nos asfixia y segun se suceden los acontecimientos te das cuenta, una vez mas, de quienes son tus compañeros de autopista y quienes sin embargo no fueron mas que espejismos de amigos en epocas de soledad. Y es que el hecho de estar aburrido en un charco de vagancia palpable, coger un telefono y con una sola llamada movilizar a tres compañeros para que acudan a hacerte compañia solo por el hecho de importarles lo suficiente, es algo que no tiene precio. Los pilares de mi razon y mi cordura, los diques de mis miedos y mis temores, tienen nombre, son mis mejores amigos, mis hermanos, y "ellos lo valen".

No quiero cerrar este post sin hablar de mujeres, asi soy yo. ¿Por que? Pues porque son el trabajo de una vida y se merecen una mencion, pero lo que quiero expresar ahora no va sobre eso, sino mas bien sobre el hecho de que hay algunas en especial que me han demostrado mucho en poco tiempo. Puede que este algo sensible ultimamente, la navidad, luces por las calles, quien sabe. Pero estas señoritas me han demostrado un cariño hacia mi que, aunque no se si sera persistente, por el momento me ha calado muy hondo y me ha ofrecido la posibilidad de ver el mundo con otros ojos, de ver el mundo con otras tonalidades de gris.

Y por ultimo, si hay que hablar de colores, hablemos del verde. Ese color que unicamente proyectado en una mirada tanta felicidad me ha dado. Evidentemente cuando hablo del color verde todos sabemos que me refiero a una chica, porque todo se reduce a eso, a "La Chica". No me considero el principe azul, ni siquiera creo en las princesas y desde luego pienso que los finales felices son quimeras. No obstante, cuando disfruto de su compañia y puedo sumergirme en ese halo de luz verde que desprenden sus ojos, no es que el mundo se vuelva maravilloso, simplemente todas las cargas que me hunden en la miseria de repende no parecen pesar tanto y puedo nadar en ese precioso oceano que son sus ojos sin miedo a ahogarme. Esto es gracias, y te lo digo a ti, a que me lo has puesto muy facil, me has ayudado a niveles que ni siquiera yo llego a comprender y creo que nunca podre demostrarte del todo cuan agradecido estoy por hacerme recordar quien soy y quien puedo llegar a ser.


Sin ninguna duda, y se que varios de mis compañeros de autopista lo corroboraran, el verde es el mejor color del mundo...




(Perdonadme la entrada tan sensiblona, pero es que hacia tiempo que no escribia y queria olvidarme de toda la oscuridad que nos rodea para centrarme en las gotas de cordura que me mantienen con vida.)