Domingo astromantico...

¿Alguna vez te has mirado a un espejo y, no has reconocido lo que veías en él?

Porque hoy me ha pasado algo parecido. He echado la vista atrás, he seguido con la mirada las huellas dejadas en la arena, los recuerdos en el aire y no me ha gustado lo que he visto.

Físicamente sigo siendo yo, eso es algo lógico, ¿no crees? Pero en cuanto a personalidad, ya no me reconozco.

Quítale a un hombre sus esperanzas y acabaras con él. Pues arrebatándole sus esperanzas le arrebatas lo único que le mueve, sus sueños. Y por desgracia mis sueños se fueron contigo hace mucho tiempo. Pero aun me quedaban esperanzas, esperanzas de tiempos mejores, esperanzas de tu vuelta y, porque no decirlo, esperanzas de unas esperanzas realistas.

Pero ahora, nada me queda. No es que no tenga esperanzas. Pero no me quedan las esperanzas que desearía tener. No sé si me explico bien, pero yo lo entiendo, que es lo importante. Porque a fin de cuentas, lo único importante es el YO, ¿verdad?

Pues no, por mucho que cueste reconocerlo, por mucho que nos empeñemos en creerlo, el YO, no es completo sin un TU, y tu, y solo tú eres capaz de mover mi mundo, de hacer que día a día quiera recuperarme y volver a ser un hombre que seas capaz de volver a amar, porque siendo realista, por mucho que quiero escribir que estoy bien, por mucho que quiera creérmelo, desde que empiezo a escribir, no, desde que despierto cada mañana, lo único que ocupa mi mente eres TU.

Y por todo esto me he visto obligado a hacer cosas de las que me arrepiento, de hacer cosas que aun debiendo haberlas disfrutado no he sido capaz de hacerlo, porque he sentido la imperiosa necesidad de creer que actuaba mal, que actuaba a tus espaldas.

Y todo esto es una tontería, porque ni siquiera sé lo que piensas tu, no sé si sigues sintiendo algo en el fondo de tu ser por mí, si alguna vez querrás volver a ser “algo” mío (Créeme que ahora mismo me conformo con “ser” la palabra más dolorosa que pueden salir de tus labios, “amigo”).

Pero soy como soy, soy ese chico al que una vez quisiste, el que te hacia reír, el que te quería, el que siempre estaba a tu lado apoyándote… dios, ¿no te das cuenta?, sigo siendo yo. Por eso seguiré con mi vida, pero aunque no sea justo para nadie, sobre todo para mí, que sufriré más que nadie si algún día rehaces tu vida sin mí, siempre habrá una alfombra roja hacia esa parte de mi ser que siempre te querrá. Porque como he dicho, sigo siendo yo, y se que tarde o temprano "abrire" esos preciosos ojos esmeralda y te daras cuenta de que deberiamos estar juntos.


“Solo puedo pensar en ti, mi amor inmortal. Solo puedo vivir del todo contigo, o de ningún modo…”